01 – Romance con el Vampiro
Romance Paranormal con el Vampiro: El Alfa y la Cambiaformas
Erik es el Príncipe en la ciudad de Nueva York. La máxima autoridad en La Unión.
Su condición de Vampiro no sólo le mantiene lejos del sol. También de su humanidad.
Pero todo eso cambia cuando Bianca llega a la ciudad. Una licántropo sin registrar.
Criada en un pequeño pueblo del interior, reflejo de la inocencia, pero a su vez con garras y colmillos ocultos, es encontrada por el Príncipe. La ley dicta que el caso se lleve a juicio ante La Unión, la coalición de criaturas paranormales que habitan en Nueva York, pero los ojos rojos de Erik se encontraron con el azul plateado de Bianca.
Los colmillos del Vampiro se desplegaron, incapaz de resistir el aroma que nublaba su juicio, invitándole a drenarla allí mismo, pero resistió el arrebato inicial. Estaba claro que esa mujer era distinta a las demás. La cuestión era, ¿la ocultaría ante La Unión, la juzgaría o conseguiría limpiar su condición?
Bianca no tenía opción, pues si Erik sacó sus colmillos al verla, ella tuvo que reprimir las ganas de aullar. Había lunas por delante, y trabajo que hacer, pero en aquel momento sólo existía una cosa: El deseo de sus ojos.
02 – La Prometida del Dragon
Romance entre la Elfa y el Cambiaformas
Mila es reconocida en todo El Velo como la princesa del linaje de los elfos.
Por supuesto, El Velo es una cortina de humo que oculta orejas puntiagudas y magia a los ojos mundanos. Mientras los mortales danzan como hormigas, hechiceros, elfos, vampiros, hadas y cambiaformas danzan por el mundo tejiendo su propia red.
Pero Mila, emplazada en un ático de Manhattan, Nueva York, recibe una inesperada visita. Jack Vane, la leyenda hecha carne y fuego. El único cambiaformas con el poder de transformarse en un dragón. El único hombre que, sin hechizos, puede gobernar el cielo, desatar un infierno y dominar al resto de las especies. Y viene con un mensaje: Es hora de que Mila reúna a dos pueblos.
En el Siglo XXI El Velo ha perdido su esplendor.
Elfos y Hadas son claramente insuficientes para hacer frente a los emperadores de la noche y los hacedores de magia. En un mundo donde el mal y la oscuridad gobiernan, donde el Rey de Nueva York es un Vampiro con poder sobre las demás dinastías, el título de princesa de Mila sólo significa algo para los suyos.
Y en vista de la amenaza que eso supone, Jack está dispuesto a dejar su exilio y unir con fuerzas con Mila. Los cambiaformas, hasta el momento neutrales, se unirían al pueblo feérico. El problema viene cuando un matrimonio de conveniencia comienza a convertirse en algo más.
Cuando el fuego y el agua comienzan a unirse de una forma más íntima.
¿Podrá Jack amar a Mila tras tanto tiempo siendo un dragón solitario?
¿Será capaz Mila de tragarse su orgullo y disfrutar de su pasión por Jack?
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